
Jerezana estudia los beneficios de la música en la salud de las personas
Misael A. Pagán-Chárriez
Estudiante Reportero
Oficina de Comunicaciones
Recinto de Río Piedras – UPR
Más que un campo artístico o una melodía que relaja, emotiva o mueve a las personas, la música puede ser un estímulo favorable para la salud mental, cognitiva y física de la ciudadanía. Incluso, podría ser un remedio alterno a cualquier tratamiento, como la farmacoterapia, según estudios.
Estos beneficios motivaron a la alumna Dariana Gil Hernández, estudiante subgraduada de doble concentración en Psicología y Música en la Universidad de Puerto Rico Recinto de Río Piedras (UPR-RRP), a realizar el estudio “El efecto de la música emocional en la memoria episódica de estudiantes universitarios hispanohablantes y su relación con el estado de ánimo”, bajo la mentoría del doctor Giovanni Tirado Santiago.
“Desde antes de entrar a la universidad, siempre me interesó ver cómo la música impacta la vida de las personas, más allá de ser simplemente algo como ‘¡Ay, qué chévere escucharla!’, sino el impacto positivo que puede tener sobre todo en personas con Alzheimer, con Parkinson, con ansiedad y autismo. Muchas poblaciones, tanto de personas saludables como personas con diferentes condiciones, se pueden beneficiar de la musicoterapia”, manifestó.
La jerezana, quien describe la música como “una herramienta bien poderosa”, desarrolla, actualmente, la mencionada investigación como parte de su proyecto final para la Mellon Mays Undergraduate Fellowship (MMUF), programa que beca a estudiantes interesados en completar un doctorado y trabajar en la docencia o en la investigación.
“Estoy bien emocionada porque se me dio la oportunidad de estudiar un proyecto interdisciplinario en el que puedo implementar mis dos concentraciones. Aparte de estar emocionada, la verdad es que ha sido un poco retante llevar a cabo los estudios y trabajar en formato remoto, pero, como es un tema que me encanta, me he movido a seguir estudiándolo”, expresó la joven de 21 años, quien toca el violonchelo.
Sobre el estudio
La memoria episódica es un sistema de memoria a largo plazo que recibe igual información sobre episodios o eventos y las relaciones temporal-espaciales de ellos, de acuerdo con el psicólogo y neurocientífico Endel Tulving.
“En otras palabras, esta es la memoria para eventos o episodios que ocurren en un lugar y tiempo particular. Un ejemplo de la memoria episódica es recordar el primer día de clases en la secundaria o recordar una cita médica en un futuro cercano, etc.”, aclaró Gil Hernández, quien espera realizar una maestría en Salud Pública especializada en Salud Mental.
La investigadora subgraduada conducirá su estudio bajo las siguientes preguntas: (1) ¿Qué efecto tendrá la música emocional en la memoria episódica verbal de estudiantes universitarios jóvenes adultos? y (2) ¿Puede el estado de ánimo, específicamente el tratamiento de la ansiedad, afectar la relación entre la música emocional y la memoria episódica?
En el análisis, participarán 50 personas de habla hispana, que no tengan conocimiento musical previo y que sean residentes en Puerto Rico y estudiantes universitarios de 18 a 29 años.
Para Gil Hernández, quien participará este verano en un internado de investigación en la Universidad de Harvard, este estudio “estaría abriendo la puerta a futuras investigaciones”, pues el enfoque que trabajará carece de literatura, según la estudiante.
También, tiene como objetivo que el conocimiento que se genere con su estudio se pueda poner en práctica sobre todo en la IUPI.
“Se podrían crear programas de musicoterapia o de rehabilitación musical que estén dirigidos a la población hispana o utilizar la música como ese medio para mejorar el proceso de estudio y aprendizaje de los estudiantes”, mencionó.
A finalizar la investigación
El pasado viernes 21 de mayo, Gil Hernández presentó la propuesta de su estudio ante un grupo de más de 20 personas, incluidos mentores, profesores, coordinadores y representantes de la MMUF, compañeros estudiantes de la beca y público en general. Ahora, la joven comenzará a resolver sus tres hipótesis y contestar sus preguntas de investigación.
“Estoy bien contenta por cómo presenté. Mi investigación apeló a la importancia de hacer estos estudios de salud mental, y las personas presentes pudieron entender la relevancia del tema. También, recibí buena retroalimentación”, dijo.
El próximo mayo de 2022, representará una fecha importante para la futura profesional de la salud mental, debido a que presentará su investigación finalizada y obtendrá su bachillerato del primer centro docente del país.
“Le agradezco a mi mentor, doctor Giovanni Tirado Santiago, por la oportunidad, el espacio en su laboratorio de neurociencia y la guía que me ha dado en todo este proceso. También, les agradezco a mis dos mentores estudiantes doctorales, José Maldonado Martínez y Karen Rosado Mercado, han sido de gran ayuda. A los coordinadores de la MMUF, mis compañeros de la beca, mi pareja, familia y amistades, gracias por apoyarme”, indicó.