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Siempre Vivas Metro a un lustro de su fundación: siempre alertas y vigilantes

Mario Alegre Barrios
Oficina de Comunicaciones

 

Con una vigilia —concepto derivado de la raíz en latín “vigil”, que en español significa “despierto”, “atento” o “vigilante”— programada para este jueves 21 de noviembre a las 6 de la tarde, frente a la Torre de la IUPI— la organización Siempre Vivas Metro continúa con su serie de actividades en ruta a la celebración del Día Internacional de la Erradicación de Violencia Contra las Mujeres, el lunes 25 de este mes.

Denominada “Ternura radical: antídoto a la violencia”, esta vigilia reitera la misión de Siempre Vivas Metro de brindar apoyo y asesoría a víctimas y sobrevivientes de violencia de género en el Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico y comunidades aledañas, precisamente desde la “vigilia”, desde ese estado de alerta —despiertas y vigilantes— para desarrollar y promover espacios seguros especialmente —pero no exclusivamente— para las mujeres y sus derechos en un marco de justicia y equidad mediante el acompañamiento solidario,  el activismo, el desarrollo de alianzas y la educación.

Fruto de la entidad Siempre Vivas que nació en el Recinto Universitario de Mayagüez hace 25 años gracias a la gestión de la profesora y trabajadora social Luisa Seijo Maldonado, Siempre Vivas Metro se fundó en la UPRRP hace ya un lustro, con la Dra. Elithet Silva Martínez como dinamo y directora, afiliada a la Escuela Graduada de Trabajo Social de Facultad de Ciencias Sociales y al Centro de Investigaciones Educativas de la Facultad de Educación.

—Comenzamos sabiendo ya de hace mucho tiempo que hay una necesidad enorme de nombrar las violencias de género para atenderlas, sanarlas e investigar sobre ellas, especialmente desde la universidad, y también prevenirlas —dice la Dra. Silva Martínez—. Esta certeza es lo que nos lleva a nosotras a movernos con todas las fuerzas de nuestro corazón, especialmente cuando miramos a los ojos a una víctima sobreviviente de violencia de género en su más auténtico y absoluto ser, con la convicción de que las violencias de género no nos definen, no nos pueden definir. Sabemos que estas cosas ocurren y lastiman, pero también creemos firmemente en que deben mirarse para reconstruir esas vidas. La belleza y satisfacción de ver al colectivo caminar para sanar es inigualable.

—¿Cuántas personas integran Siempre Vivas Metro?

—Pues mira, Siempre Vivas Metro comenzó en la Escuela Graduada de Trabajo Social, pero casi inmediatamente se le unió mucha gente de distintas facultades, por lo que es un proyecto interfacultativo —explica Elithet—.  El equipo se compone de compañeras trabajadoras sociales, estudiantes de distintas facultades, como Ciencias Sociales, Humanidades y Educación. Asimismo, tenemos un proyecto hermoso con mujeres docentes y no docentes con la Facultad de Ciencias Naturales y con las escuelas laboratorio que son vitales también.

Elithet señala que para ella y sus colaboradoras ha sido muy estimulante “ver que la Universidad de Puerto Rico tiene un deber ministerial muy particular para Puerto Rico desde la investigación y el desarrollo de la ciencia, en este caso de las ciencias sociales”.

—Así es que nosotras trabajamos desde la investigación sobre estos temas, trabajamos con el acompañamiento, con esa intervención directa y también con la formación de estudiantes —apunta—. A lo largo de estos cinco años hemos tenido estudiantes de muchas facultades y ofreciendo cursos para formar gente que pueda acompañar, para formar gente que pueda hacer política pública respecto a este tema y pueda hacer un análisis.

La directora de Siempre Vivas Metro hace énfasis en que es vital que se conozca la existencia de esta organización, su trayectoria y lo que ofrece.

—Queremos contar nuevamente esta historia, especialmente porque el 25 de noviembre es el Día Internacional de la Erradicación de Violencia Contra las Mujeres y, como todos los años, ahora mismo tenemos una campaña de prevención de violencia de género en el recinto, en la que estamos planteando que el espacio universitario puede y debe ser un espacio seguro, solidario y donde las violencias no sean parte de la ecuación —comenta—. Porque ¿cómo formarse académicamente, cómo estudiar, cuando siento miedo de que alguien me pueda hacer daño o cuando tengo un peso sobre mi sombra que no me permite ni tan siquiera concentrarme? Está probado que la educación, y particularmente la educación superior, pueden ser una puerta para escapar de la violencia de género. No estoy diciendo que es la clave completa, pero es parte. Así que nosotras estamos planteando que la universidad tiene un rol, no solamente en investigar sobre las violencias de género en Puerto Rico y en el Caribe, porque tenemos vinculaciones con el Caribe y la diáspora, sino que también tenemos la obligación de pensar en que el acceso a la educación tiene que ver con el apoyo a quienes sobreviven las violencias de género y tiene que ver con la prevención de la violencia de género.

—¿Cómo enfrentan ese ideal, vis a vis esta realidad que nos da en la cara todos los días en la que parecería no haber escape ni solución?

—Es cierto y lo vemos en las noticias todos los días y lo trabajamos aquí todos los días, así que estamos muy claras de esa dura realidad —dice Jennifer Oliveras Del Río, trabajadora social y parte fundamental del equipo de Siempre Vivas Metro—. Se hacen cosas como declarar un “estado de emergencia”, pero no estamos seguras de que haya sido lo que se planteó ni lo que se esperaba. Nosotros creemos que el Estado tiene que hacer su trabajo, pero nosotras apostamos a la prevención y lo hacemos en diversos niveles. Creamos conciencia en las personas y las sensibilizamos, las educamos también, incluso desde las escuelas. Lo hacemos también en el recinto, porque creemos que la prevención debe ir en todos los niveles. Ahora mismo tenemos aquí un proyecto con una campaña de prevención, que de hecho salió la semana pasada, donde estamos apostando a que las personas en la comunidad universitaria podamos identificar esas señales de potenciales situaciones de violencia. Es verdad que a veces parece que  enfrentamos algo que no se va a acabar, pero aquí, todo el tiempo en que llega alguien con una historia de violencia o de desamparo y desesperanza, nos sentimos comprometidas con ayudarles a repensar sus vidas. O ver como los niños y niñas también tienen algo que decir, como por ejemplo “ahora sé cómo se ve una relación que no debe ser” o “ahora sé lo que es consentimiento”.

Si bien es cierto de que no se ofrecen estadísticas precisas sobre lo medibles que pueden ser este tipo de iniciativas, Siempre Vivas Metro recibe constantemente testimonios de la huella que deja entre quienes sirve.

—Pienso que quizás no tenemos unas respuestas tan cuantitativas, sin embargo, desde las ciencias sociales, creo que tiene igual peso y valor lo que son las recopilaciones de datos cualitativos —comenta Laura García Soto, también trabajadora social y colaboradora en Siempre Vivas Metro—.  De eso sí tenemos montones de evidencia y citas directas de estudiantes que dicen cosas como “ahora sé cómo se ve el machismo” o “entendí que en mi casa hay injusticia porque mi mamá trabaja más”. Damos talleres en muchas escuelas…  a donde nos abran las puertas. A veces es un pequeño reto a nivel institucional que nos den los permisos para ir, pero por la vocación que tenemos, pues, insistimos y lo hacemos como quieran, desde kínder hasta cuarto año. Los temas de los talleres se adaptan según las edades de los estudiantes.

—De una de las cosas que nos hemos dado cuenta con las escuelas es que acompañar a la niñez tiene que ir, a su vez, vinculado a acompañar a quienes acompañan —apunta Elithet—. Ese trabajo con los docentes y con las docentes ha sido vital, y hemos estado trabajando con eso, en cómo hacemos un proyecto de escuela para que haya una respuesta informada en las mejores prácticas, centrada en la persona. Ese es otro trabajo que entendemos que es bien importante. No siempre lo vemos, pero nosotros nos hemos comprometido a eso. No podemos educar a la niñez sobre esto sin hablar con la gente que está alrededor de cómo va a manejar esto y qué es lo que establece la ley. Así que termina siendo un trabajo de comunidad.

Sobre la vigilia de este jueves 21, Elithet comenta que  se trata de abrir un espacio para nombrar las violencias, pero también “para sanarlas el arte”.

—Así que vamos a tener música, poesía, artesanía… en fin, un espacio colectivo para acompañarnos y para nombrar y también sanar —dice ella.

Asimismo, como parte de su agenda anual, Siempre Vivas Metro tiene un espacio —liderado por la trabajadora social y colaboradora del grupo Jennifer Oliveras Del Río—, que capacita a personas que trabajan en la IUPI, como profesores, personal de la administración y miembros de la guardia universitaria.

—Les ofrecemos un ciclo de capacitaciones para ellos y para ellas, para que podamos, como comunidad universitaria, tener un lenguaje común al manejar situaciones de violencia de género en el recinto —explica Jennifer—. Ya comenzamos el 11 de octubre con oficiales de seguridad e integrantes del Decanato de Estudiantes, de la Junta de Disciplina y de la Oficina de Título IX. Los vamos a continuar hasta diciembre y los retomamos el próximo semestre.

—Nosotras atendemos estudiantes, empleadas y personas de la comunidad, tanto de manera presencial como virtual, lo mismo de la isla que de la diáspora —añade Elithet—. No hay manera de decir que la universidad no esté implicada con estos asuntos, que no le corresponde a la universidad del pueblo de Puerto Rico. Y por eso es por lo que existimos, porque sabemos que, para estudiar en paz, necesito ser acompañada. Este es un espacio vital  donde las historias de quienes servimos están resguardadas, donde tu historia es tuya, y tú asumes autonomía de tu ella. Es algo muy poderoso y sanador. Y por eso es por lo que nosotras seguimos aquí.

Agenda para el resto del semestre:

  • Vigilia – “Ternura radical: antídoto a la violencia”: jueves, 21 de noviembre de 2024 a las 6:00 p.m. Frente a la Torre de la UPRRP
  • Adiestramientos a personal del recinto (Oficiales de seguridad, Decanato de Estudiantes, Título IX y Junta de disciplina:
    • Viernes, 22 de noviembre: Consentimiento de las Víctimas/Sobrevivientes en los Procesos de Búsqueda de Servicios y Acompañamiento.
    • Viernes, 6 de diciembre: Violencia doméstica en el contexto universitario
    • Viernes, 13 de diciembre: Acecho en el contexto universitario
  • Seamos hogar: ¿cómo acompañar a sobrevivientes de violencia?: 9 de diciembre a las 6:00 p.m. a través de Instagram SIEMPRE VIVAS Metro (actividad virtual)

 

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